De merienda, que mejor que una deliciosa tarta para celebrar el cumpleaños de Víctor. Las velas listas y felices 19 años. Todos le cantamos y sopló las velas para dejar paso al disfrute de la tarta. Una vez llenos y para poder pasar mejor esta calor y el verano, qué mejor que una fiesta del agua.
Preparados los globos y la manguera, todos con los bañadores y listos. ¡Guerra de globos! No se escapó nadie y acabamos todos empapados. Por supuesto, para los que se escaparon de los globos, teníamos preparado la manguera. Así que pasamos una tarde muy completa y divertida.