Y es que febrero va a ser un mes que recordaremos siempre en la Residencia Aspramif – Entrepinares del Mercadillo. Mes en el que todos nos hemos demostrado el cariño que nos merecemos. Mes en el que trabajadores y usuarios nos hemos sentido más unidos que nunca. Mes en el que hemos visto que la unión hace la fuerza. Mes que nos va a recordar que la vida merece la pena y que trabajar por los que más lo necesitan es el mayor de los regalos.